Vamos
a ver cómo podemos reproducir nuestras suculentas a partir de cortes de plantas
de este tipo que tengamos en casa o que nos hayan regalado, La preparación del
sustrato es fundamental para tener éxito en la reproducción y posterior
desarrollo de las plantas crasas. Compondremos un sustrato liviano pinocha una parte
de arena.
Otra
parte de perlita, la perlita nos proporciona aireación y drenaje al mismo
tiempo. Además, actúa como reservorio del agua de riego que a continuación
añadiremos otra parte de vermiculita. También mejora la aireación y drenaje y
acumula humedad y nutrientes que irá liberando lentamente a la planta. La
perlita y la vermiculita son una buena base para el desarrollo de las raíces de
las suculentas. Obviamente también agregaremos sustrato del que usemos
normalmente para acabar de completar el suelo para nuestras suculentas, va
liberando lentamente.
Regamos nuestra
composición personal de suelo para suculentas. Con un buen aporte hídrico
mejoraremos las posibilidades de enraizamiento. Mezclamos bien todos los componentes del suelo para crear una superficie
homogénea para la reproducción de los cortes. En una bandeja de cultivo,
semillero o similar colocamos una servilleta de papel en el fondo. Nos ayudará
a retener la humedad que luego liberará lentamente al suelo.
Rellenamos
la bandeja o maceta con el sustrato que hemos compuesto anteriormente. Este sustrato
también va muy bien para el cultivo de cactus. Preparamos los cortes que
tenemos para garantizar su enraizamiento. Los habremos cortado con poco tallo y
es precisa una cierta preparación del corte quitaremos las hojas de la parte
inferior dejando el esqueje libre de 1.5 cm aproximadamente. Al mismo tiempo
quitaremos cualquier brote o flor que pueda presentar el corte, nos interesa
que éste dedique toda su energía al enraizamiento.
Cuando
tengamos listos todos los esquejes de suculenta comenzaremos a hincarlos en el
sustrato. Procurando que el esqueje, quede con espacio suficiente para que los
cortes no se molesten unos a otros. Así nos aseguramos de que tengan suficiente
terreno donde poder sacar el nutriente que precisarán para el enraizamiento y
también para que las raíces de cada corte no se mezclen con las de los demás.
Las hojas que antes
quitamos a cada corte de la planta podemos aprovecharlos también para
reproducir más suculentas. Hemos de cerciorarnos de la buena salud de las
hojas, deben estar duras y sin síntomas de flaccidez. Simplemente hincarlas
verticalmente en el sustrato. Nos
aseguraremos de que el sustrato tenga suficiente humedad. Entre las cuatro y
seis semanas desde que realizamos el cultivo apreciaremos el crecimiento de los
cortes. Será el momento de trasplantarlos a macetas individuales.