Cuando te regalan un bonsái, te están regalando una
vida, esperanza, nuevas oportunidades. Te ofrecen la opción de poder cuidar
algo, en este caso un bonsái, de que con
algo tan simple como un poco de agua al día, veas crecer sus ramas y que con el
paso del tiempo va a ir haciéndose más grande, va evolucionando, aumentando su
belleza, crecimiento y volviéndose radiante.
Algo que te necesita día a día y que dedicándole un
poco de tiempo, un poco de agua, sol un cambio ocasional de maceta, va a
iluminar tus días con frescura y el divino color de sus suaves pétalos. Algo
que va a darte oportunidad de ver como un ligero esfuerzo se ve transformado en
algo que forma parte de ti y tú de ellos, que de una pequeña plantita con
diminutos brotes, salga una gran planta que de vida a todo un salón o vivienda.
Regalar un bonsái es una gran metáfora de las
oportunidades y proyecto que te regala de vez en cuando la vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario